Las Otras Noticias - 2021 (155)

OTRAS NOTICIAS (155)

15 de Febrero de 2021

 

FUENTES: El País, eldiario.es, Público, InfoLibre, Hufftinton post, ctxt.es, Cadena Ser.

COVID-19: LA CONFIANZA ES ENEMIGA.-

Los contagiados en todo el mundo son ya 109 millones, y los fallecidos 2,4 millones. Ya se han administrado 160 millones de dosis de vacunas en 70 países, sobre todo de Europa y América del Norte. Más de 100 países continúan esperando.

En España, el número total de contagiados es ya de 3.086.286, y el de fallecidos de 65.449. Muchos hospitales hace meses que han aplazado las intervenciones quirúrgicas no urgentes. No obstante, los indicadores marcan una clara tendencia a la mejoría: La incidencia acumulada a 14 días por 100.000 habitantes ha descendido de 865 a 417 casos en dos semanas. La tasa de ocupación hospitalaria de enfermos de COVID-19 ha bajado del 25% al 16,47%, y la de las UCI de 43,10% a 39,78%. Ya han sido administradas 2.528.955 dosis de vacunas, y 1.070.091 de personas han sido inmunizadas (han recibido las dos dosis).

Autoridades de varias comunidades autónomas se apresuran a flexibilizar las restricciones, mientras la Organización Mundial de la Salud y los epidemiólogos advierten que las tasas de transmisión se mantienen muy altas y piden mantener las restricciones hasta llegar a una incidencia menor a los 50 casos por cada 100.000 habitantes. ¿Caeremos en el mismo error que en el verano o Navidad? ¿Aumentar las restricciones cuando se ha elevado el número de muertos, o mantenerlas para evitar que se eleve el número de muertos?

Otro ángulo de la pandemia: En China (la denostada China que tan mal hace las cosas) ocurre que pasan varios días sin que se produzca ningún contagio en todo el país (1.400 millones de personas). El 12 de febrero, por ejemplo, se produjeron 12 contagios, todos ellos diagnosticados a viajeros procedentes de fuera del país. Y el gobierno de Nueva Zelanda ha confinado Auckland, la mayor ciudad del país, luego de que una familia de tres personas diera positivo por coronavirus. Lo llaman "alto grado de precaución”. Nueva Zelanda (cinco millones de habitantes) solo ha registrado 2.330 infecciones y 25 fallecimientos por la enfermedad.

ÁFRICA.-

Los contagios en África suman 3,7 millones y los fallecidos ya han superado los 100.000, la mitad de ellos en Sudáfrica. Así informa la OMS.

El 40% de contagios y fallecimientos se han producido el último mes.

En la mayoría de los países africanos no se ha iniciado la vacunación. Se espera que en la primera mitad del año pueda ser vacunado el 3% de la población más vulnerable, y que al finalizar 2021 se alcance al 20%.

LA PANDEMIA Y LA BRECHA SOCIAL.-

Los muertos en el mundo por la pandemia se acercan a los dos millones y medio, y cientos de millones de personas han sido arrastradas a la pobreza. Mientras tanto, según la revista Forbes, la fortuna de las 10 personas más ricas del mundo creció conjuntamente en 540.000 millones de dólares en 2020, cantidad suficiente para financiar la vacuna universal contra el virus. Así lo dice Oxfam en su reciente informe “El virus de la desigualdad”.

En el mundo se ha abierto “la peor crisis laboral en más de 90 años, y cientos de millones de personas se encuentran subempleadas o sin trabajo”.

Según el Programa Mundial de Alimentos, de la ONU, a finales de 2020 la pandemia había elevado a 270 millones de personas a la situación de “hambre extrema” (un 80% más que un año antes).

Los multimillonarios recuperaron sus pérdidas en sólo nueve meses. Los más pobres tardarán al menos diez años para recuperarse de la crisis actual.

Refiriéndose a la pandemia, el Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, dijo que, “si bien todos flotamos en el mismo mar, está claro que algunos navegan en súper-yates mientras otros se aferran a desechos flotantes”.

¿Cómo recomponer un mundo devastado por el coronavirus? Oxfam responde que el objetivo no debe limitarse a volver a los niveles de desigualdad previos a la crisis, sino que es necesario construir con carácter de urgencia un mundo más justo. Y para ello hay que inventar modelos económicos libres de explotación y con seguridad de ingresos, donde los más ricos paguen los impuestos que les correspondan, y donde se priorice la seguridad climática.

EL GASTO SOCIAL EN ESPAÑA.-

Las personas que en España viven en pobreza severa (renta inferior a 5.826 euros anuales o 16 euros al día) son 5,1 millones, y las que viven en pobreza relativa (renta inferior a 8.739 euros anuales o 24 euros al día) 10,9 millones. El desempleo alcanza a 3.964.353 personas (el 16,1% de la población económicamente activa). Los hogares con todos sus miembros en paro son 1.197.000. La tasa de temporalidad en el empleo es del 24,6%... Son datos publicados recientemente por Oxfam y la Encuesta de Población Activa.

Datos publicados por Eurostat, Oficina Estadística de la Unión Europea, indican que España queda por debajo del conjunto de los 27 en gasto social. He aquí algunos datos:

  • España gasta al año 5.948 euros por habitante en "protección social" (el 23,1% del Producto Interior Bruto); la Unión Europea gasta en promedio 8.074,4 euros (el 26,7% del PIB).
  • Antes de la pandemia, España gastaba en Sanidad 1.586,4 euros por habitante al año (el 6,2% del PIB), frente a 2.362,1 euros de la UE (el 7,8% del PIB).
  • En Dependencia, España gasta al año 419 euros por habitante (1,6% del PIB), mientras la UE gasta 617,3 euros (2% del PIB).
  • En el área de "Familia e infancia", España gasta 326,9 euros por habitante al año (el 1,3% del PIB), y la UE gasta 672,1euros (el 2,2% del PIB).
  • España gasta en políticas públicas de vivienda social 27,3 euros por habitante al año (el 0,1% del PIB), frente 115 euros de la UE (el 0,4%)
  • El gasto de España en políticas para la inclusión es de 59,5 euros por persona al año (el 0,2% del PIB), mientras la UE gasta 183,2 euros (el 0,6%).

La situación, pues, no es sólo efecto de la pandemia. La cosa viene de atrás: del evidente subdesarrollo de las políticas sociales en España, así como la fragilidad de nuestro estado del bienestar.

LEONOR.-

La princesa Leonor, de 15 años, heredera de la corona española, cursará los dos años de Bachillerato Internacional (2021-2023) en la institución educativa privada “Colegios del Mundo Unido” (UWC, por sus siglas en inglés), en el Atlantic College ubicado en St Donat’s, un castillo del siglo XII en la costa del sur de Gales, Reino Unido, en régimen de internado.

La institución está financiada por importantes empresas (entre ellos el BBVA, la Caixa, ONCE y Prosegur), fundaciones y el aporte de particulares. Los reyes de España son “Altos Patronos” de la institución, y les corresponde nombrar al presidente del Patronato, según estatutos. En ella estudian alumnos de hasta 80 nacionalidades, procedentes de diversos estratos económicos. La matrícula de los dos cursos tiene un costo de 67.000 libras esterlinas, unos 76.500 euros, que pagarán los reyes, sus padres, del presupuesto que reciben del Estado (es decir, de todos los españoles). No se ha informado de otros gastos adicionales (seguridad, acompañantes…).

El gasto de las familias españolas por alumno en los dos cursos de bachillerato promedia 1.556 euros, un 2% de lo que costará el bachillerato de Leonor.

Leonor y su hermana la infanta Sofía, al igual que su padre Felipe VI, han estudiado la primaria y la enseñanza secundaria obligatoria en el colegio católico privado Santa María de los Rosales, en Madrid, cuya matrícula cuesta unos 7.000 euros al año.

Algunos sectores se han preguntado si la decisión de enviar a la princesa a Gales no implica cierto desdén hacia los centros educativos españoles (públicos y privados) y si es convenientes alejar de la realidad social española y envolver en una burbuja elitista a quien será la futura jefa del Estado.

LA GENTE RESISTE EN MYANMAR.-

La gente sigue saliendo a manifestarse a las calles en contra del golpe de estado perpetrado por el ejército el 1 de febrero, ante lo que el régimen responde con "la violencia desproporcionada" y el "uso de fuerza letal", según la organización humanitaria Human Rights Watch. La policía utiliza contra los manifestantes munición real, cañones de agua y pelotas de goma.

Mientras siguen las detenciones políticas (al menos 400), la Junta militar ha anunciado una amnistía para más de 23.000 prisioneros condenados antes del 31 de enero de este año.

El Consejo de Derechos Humanos de la ONU ha condenado el golpe y ha pedido la liberación de los detenidos, y considera decretar sanciones internacionales contra el país.

La Junta militar sigue recortando libertades a los ciudadanos, que ahora pueden ser detenidos por la noche y sin orden judicial. Las comunicaciones han sido interrumpidas y el ejército ha sacado los tanques a la calle.

Algunos monjes, como los del prestigioso monasterio Mya Taung, se han unido a las movilizaciones contra la Junta.

¿PÉRDIDAS DE LA BANCA?

La gran banca española (Santander, BBVA, CaixaBank, Bankia, Bankínter y Sabadell) cerró 2020 con unas pérdidas formales de 5.537 (En 2019 habían ganado 13.592 millones). En realidad, solo perdió el Santander; los otros ganaron menos de lo esperado.

La pérdida se explica porque, pese a que en su actividad comercial ganaron 10.095 millones, dedicaron 25.316 millones a “provisiones” de fondos para hacer frente a la pérdida de valor de algunas de sus áreas de negocio como consecuencia de la pandemia (probablemente muchas de esas provisiones no lleguen a sustanciarse).

Pese a las pérdidas, el sector bancario se ha mantenido a flote gracias a tres pilares: El cobro de comisiones a los clientes, hasta por 20.266 millones de euros (el 25% de sus ingresos comerciales); la reducción de costes hasta por 5.013 millones (despido de 2.355 empleados y cierre de 1.224 oficinas); y el aumento del negocio gracias a algunas medidas de escudo social como los avales del ICO y las moratorias de hipotecas y de créditos de consumo.

ENFERMEDADES TROPICALES OLVIDADAS.-

La Organización Mundial de la Salud ha aprobado recientemente un plan que se propone, de aquí a 2030, reducir en un 90% la población afectada por las enfermedades tropicales desatendidas. Se trata de un grupo de 20 enfermedades como lepra, helmintiasis, oncocercosis, esquistosomiasis, dengue, leishmaniasis, chagas, Expanda sección

paludismo, tiberculosis y otras, que afectan en conjunto a más de 1.000 millones de personas (el 13% de la población mundial), con efectos devastadores sobre su salud y sus condiciones socioeconómicas de poblaciones empobrecidas.

La enfermedad de Chagas (tripanosomiasis americana), por ejemplo, afecta a unos 7,3 millones de personas (la mitad de ellas viven en Argentina, Brasil y México). Es transmitida por la picadura de un insecto que inocula el parásito, que con el tiempo llega a ocasionar problemas cardíacos graves e incluso la muerte. De hecho, mueren cada año alrededor de 14.000 personas por esa causa.

Son enfermedades íntimamente asociadas a la pobreza. su trasmisión tiene que ver con la contaminación ambiental y la insalubridad, con las malas condiciones de vida y de higiene de las poblaciones, con la precariedad de las viviendas… Varias de ellas, luego de haber sido controladas y haber descendido sustancialmente el número de afectados a finales del siglo XX, han reaparecido con fuerza en el siglo XXI

EMPLEADAS DE HOGAR: PRECARIEDAD INSTITUCIONALIZADA.-

Cuando se desató la pandemia hace un año, las empleadas de hogar dadas de alta en la Seguridad Social eran 388.480, aunque en realidad son más de medio millón.

En marzo de 2020 el gobierno aprobó un subsidio especial para las que se quedaron sin trabajo a consecuencia del confinamiento, aplicable a quienes estuvieran de alta en la Seguridad Social antes del 14 de y pudieran demostrar que se quedaron sin trabajo con la rescisión de su contrato o la baja en la Seguridad Social. Hasta ahora, sólo 38.249 han logrado acceder a esa prestación.

Fuentes sindicales estiman que más de 180.000 familias emplean para las tareas domésticas a personal sin contrato. Es un sector donde el 90% son mujeres y el 45% de origen extranjero

Durante los tres meses de confinamiento, en la primavera de 2020, el 90% de las trabajadoras domésticas no cobró nada.

El gobierno, que había previsto integrar a este sector en el Régimen General de la Seguridad Social en este año, la ha retrasado hasta 2023.